lunes, 30 de junio de 2014

Todo esto.

A veces estás haciendo algo, algo bueno, algo malo, definitivamente algo distinto, y entonces todo brota a borbotones de adentro y te desborda y te encuentra y te interpela y te dice cosas, miles de cosas, a veces ininterpretables. Por lo general te ecuentra solo porque te busca solo. Te quiere vulenrable para que te modifiques por lo que pasa. Te invade en el momento en el que no hay ninguna barrera que puedas interponer en contra. Y te pregunta. Te pregunta cómo vas a hacer para amar en la lejanía. Te pregunta cómo vas a hacer para amar en la cercanía. Te pregunta si te vas a olvidar o si vas a ser lo suficientemente fuerte para recodar. Te pregunta si esto te va a volver mejor o peor persona. Te hace dudar sobre lo que vas a perder o sobre lo que vas a ganar. Te pregunta, todo el tiempo, si lo vas a poder sostener. A dónde vas a ir a parar. Si estás seguro. ¿Seguro? ¿Seguro que estás seguro? Y entonces vas de a poco convirtiendo todas esas preguntas, preguntas que te hacen llorar o reir o angustiarte, en "cómos". Cómo voy a hacer para amar. Cómo voy a hacer para recordar. Cómo voy a hacer para ser mejor. Y así empezás a dar respuestas, de a poco, a veces muy fácilmente, a veces con dolor, la mayoría de las veces con miedo, la mayoría de las veces en la más absoluta soledad interna, de donde nace la inseguridad y la seguridad. De donde nacen la angustia y la paz. Y vas convirtiendo todo, de a poco, hasta que finalmente te olvidás de lo difícil que era todo esto.    

martes, 10 de junio de 2014

Prescripción

Si prescribo
como temo prescribir
alejado
de todo acto desinteresado
en la independencia del olvido
con las trampas de mi memoria.

Si prescribo
tan absurdamente
indigno
de todo acto desinteresado
en la independencia del olvido
con las trampas de mi memoria.

Si prescribo así,
será merecidamente,
perdido
en la independencia del olvido
con las trampas de mi memoria.

jueves, 5 de junio de 2014

Materialidad

Yo no puedo leer entre líneas 
porque entre líneas
el tiempo es tirano
la noche apremia
el silencio desgasta
el frío quema
la soledad mata
la duda corroe,
y no se puede pensar
porque no se puede parar
el deseo es un lujo del pasado
que no vive de esta materialidad 
del presente constante que vivo, 
de lo que hay
lo que decís
lo que existe
lo que hacemos
y nada de todo lo demás.